Casa Santa Emilia / Aníbal Bizzotto + Bruno Sirabo


Descripción textual proporcionada por el arquitecto. La casa está ubicada en una comunidad cerrada. pueblo rosa. Dirigido a la clase media, este tipo de desarrollo se está expandiendo ya que el costo de los terrenos es bajo en comparación con el valor que ofrece el mercado inmobiliario en zonas urbanizadas. Los edificios existentes son homogéneos y de escalas variables, característicos de estos enclaves, pero no existen referencias definitivas.

En este caso el edificio se entiende como una vivienda más del conjunto. Siguiendo los métodos de construcción tradicionales y la definición de una imagen tradicional, la casa pretende ser una residencia más dentro del contexto. Debido al pequeño tamaño del terreno y la exposición al sol de adelante hacia atrás, se optó por desarrollar un edificio compacto dispuesto en un lado del terreno con una entrada semicubierta que mediara la relación del patio lateral con la calle.

La entrada y el vestíbulo pueden servir como salas de consulta o habitaciones de invitados, posiblemente separadas de la vida diaria de la casa. De forma muy tradicional, el primer piso se fusiona con un espacioso salón-comedor que se extiende directamente sobre el parque a través de cuatro ventanas, y en el otro lado mide unos nueve metros de largo por siete de ancho, donde una gran galería contiene una terraza al aire libre. Comedor Área cerca de la piscina. La primera planta define la zona de padres y la zona de dormitorio de los niños.

Una sala de estar privada en el hueco de la escalera conecta las dos áreas, permitiendo a la familia compartir momentos de relajación y estudio. Reducir la superficie de servicio y asignar más espacio a las zonas y habitaciones públicas es un requisito previo. Los pilares metálicos de la planta baja aportan cierta ligereza a la planta baja, una estructura autoportante asociada a ventanas de aluminio.

La casa está orientada en buena dirección y disfruta de amplias vistas sobre el terreno y la calle vecinos. Los grandes ventanales están diseñados para maximizar la luz natural y están ubicados estratégicamente para lograr condiciones óptimas de iluminación y ventilación.


En cuanto a los materiales, la construcción no buscó procedimientos complicados, utilizándose encofrados de madera como hormigón, formando un marco con un sistema tradicional de vigas pretensadas colocadas en una sola dirección. La elección de mampostería de ladrillo hueco de 12 pulgadas lograría el confort térmico deseado en este entorno suburbano.

Un acabado de cemento blanco define el acabado exterior y acompaña la técnica del enlucido en el interior. Estas decisiones se evalúan con base en presupuestos limitados y la evaluación y disponibilidad de mano de obra local.
