Museo de Arte Thangka del Tíbet/Estudio AND


Descripción textual proporcionada por el arquitecto. Hace seis años, nos invitaron a participar en el diseño del Museo de Arte Thangka, una colección de arte tradicional budista thangka. El sitio está ubicado al pie de la montaña Pengbu en el sur. Lhasa, frente al Palacio Potala, al otro lado del río Lhasa. Al estar lejos del área central de Lhasa, el sitio nos dio más libertad de diseño, pero también planteó el desafío de cómo innovar manteniéndonos fieles a la tradición. El objetivo es armonizar su volumen con su esencia espiritual.


Teniendo en cuenta la conexión espiritual entre el diseño arquitectónico tradicional tibetano y las montañas circundantes, propusimos trasladar el sitio del centro del parque a las colinas para mejorar el diálogo entre el museo, las montañas y el cielo. Inspirándonos en las características arquitectónicas del Palacio Potala, tomamos el prototipo de un tabique escalonado y lo dividimos en seis volúmenes interconectados a lo largo de la pendiente.


Hemos diseñado dos rutas turísticas. El concepto de «montaña» tiene un profundo significado espiritual para los residentes locales. Por ello, en el recorrido exterior, los visitantes ascienden por diversas plataformas escalonadas formadas entre diferentes edificios y pueden admirar las grandes thangkas que cuelgan de las torres. La torre principal también actúa como una «torre de viento» con un sistema de muro cortina de doble ventilador que garantiza el control del clima interior y la ventilación natural.



El recorrido interior sigue la organización espacial de un museo moderno. El amplio y luminoso vestíbulo conecta varios bloques funcionales. Además de las cinco salas de exposiciones, también hay espacios públicos de ocio. La iluminación de la sala de exposiciones es principalmente artificial, complementada con luz natural difusa. También llevamos a cabo investigaciones y diseños especiales en las paredes de la exposición.


Dado que las normas medioambientales prohíben la explotación de canteras, optamos por reinterpretar los tradicionales muros de piedra con dobles capas de hormigón. El diseño mejora el aislamiento térmico y acústico del edificio y reduce con éxito el consumo de energía.


Diseñamos especialmente encofrados de madera texturizada. A través de la textura de la fachada que crearon se logra un efecto de iluminación similar a las sombras en la fachada de una casa tibetana. Además, también utilizamos vocabulario arquitectónico moderno para reproducir el estilo arquitectónico tradicional local, como el dintel de la entrada principal y las decoraciones de las ventanas de la fachada.


Desde la perspectiva de un arquitecto, tradujimos nuestra comprensión de la cultura y la arquitectura locales en un diseño espacial práctico, creando un museo moderno profundamente arraigado en el contexto local. Esperamos que el Museo de Arte Thangka pueda convertirse en un nuevo vínculo y nexo, estableciendo nuevas relaciones para que las personas se comuniquen con este lugar.
