Descripción textual proporcionada por el arquitecto. En Midsommarkransen, un suburbio de Estocolmo, se construyó una nueva escuela primaria con capacidad para 1.000 alumnos mediante la renovación y ampliación de una antigua estación de bomberos de 1940. Un campus y un patio de juegos inspirados en las formas hexagonales de los edificios existentes, así como un área creada en el sitio adyacente al cercano Parque Embaken que preserva el paisaje natural, permiten el uso compartido por ambos.
Debido al valor histórico de la antigua estación de bomberos, era importante celebrar su arquitectura y permitir que su fachada principal que da a la calle siguiera siendo un hito fácilmente identificable en el entorno local. El primer piso, antiguamente utilizado como aparcamiento para los camiones de bomberos, ha sido cuidadosamente transformado en una atractiva cafetería para todos los alumnos de la nueva escuela, mientras que el piso superior se ha transformado en un espacio de preescolar. El poste del bombero y la abertura hexagonal que conecta los dos pisos permanecieron intactos.
Situado «detrás» y conectado a la antigua estación de bomberos hay un nuevo edificio de cinco pisos. El volumen compacto permite que la enseñanza se lleve a cabo en aulas bien pensadas, complementadas con un viejo roble y áreas boscosas conservadas en el lugar. Dos grandes escaleras y espacios de altura completa garantizan que el interior de la escuela esté lleno de una sensación de comunidad y luz natural. El sótano alberga una sala polivalente para deportes y juego, mientras que la planta superior revestida de metal presenta un volumen más ligero y reducido y da acceso a la terraza exterior.
La fachada de hormigón color arena del nuevo edificio crea un contraste interesante con la fachada de ladrillo rojo de la antigua estación de bomberos, creando un diálogo entre las dos estructuras. Como una importante adición al área de Midsommarkransen, la fachada está diseñada con una expresión en relieve única que realza la profundidad, así como las sombras y las luces. Dos entradas articuladas (con un reloj de gran tamaño incorporado y un banco para pasar el rato con amigos) ubicadas en esquinas opuestas del edificio están inspiradas en la expresión única de la fachada frontal de la antigua estación de bomberos, pero también marcan el edificio. El nuevo propósito del El sitio es como un patio de juegos para la escuela y el campus.
