Descripción textual proporcionada por el arquitecto. El cliente, un profesional de ingeniería y operaciones de rescate marítimo, seleccionó un sitio cerca del aeropuerto de Vanana, porbandel. Discutieron varios conceptos y planes de diseño para el hogar durante la pandemia de Covid-19. El sitio tenía 65,000 pies cuadrados y requería tres dormitorios, grandes aberturas y conexiones verdes. El cliente quería una casa que fuera relajante y funcional, pero que también fuera adecuada para los padres, ya que sus suegros la usarían con frecuencia.
El diseño de la casa presenta un largo camino de entrada, un porche con una gran pared blanca, una sala de estar con techos altos, un comedor y sala familiar, una pequeña terraza cubierta y una terraza con una piscina larga. Estos espacios están entrelazados entre sí y con la naturaleza, creando una conexión visual perfecta.
La piscina se ubica entre el salón alto y el dormitorio principal, entre el salón-comedor y el espacio del jardín. El reflejo del cielo en la piscina crea un efecto visual fascinante entre las paredes blancas y el estuco estriado. Un espacio circular hundido junto a la sala de estar formal brinda una experiencia única para sentarse al aire libre.
Hay tres dormitorios en la casa, con el dormitorio principal ubicado al lado de la piscina y el jardín delantero. Dos dormitorios adicionales están uno al lado del otro, cada uno con un nicho y una terraza que conduce al jardín zen en la parte trasera. El baño es limpio, sencillo y minimalista, con un tragaluz y una ducha abierta que añaden vivacidad al espacio. El baño del dormitorio principal es un espacio tipo spa, con una combinación de blanco y azul que contribuye a la estética general.
El paisajismo de la casa amplía este lenguaje simple, presentando extensos prados verdes llenos de especies de plantas nativas y pastos silvestres.
