Villa Mahler es la casa más pequeña ubicada en Stuttgart, Alemania, construida por Felipe Arquitectos. La estructura en forma de L integra la arquitectura y el diseño de interiores en un todo armonioso, proporcionando un espacio a la vez expresivo y sobrio. En su núcleo hay un ala habitable de cinco metros de altura donde la cocina, el comedor y la sala de estar se unen en un espacio abierto. La luz natural entra a través de ventanas de guillotina del piso al techo y una fachada completamente acristalada, proyectando patrones dinámicos de luces y sombras que cambian con la hora del día y la estación. La paleta de materias primas de hormigón, acero y madera confiere al espacio un carácter fuerte pero sobrio.
Muebles hechos a mano y textiles personalizados complementan la arquitectura. Elaboradas con precisión en la Selva Negra, las piezas de metal y madera carbonizada de Eichkorn Design son una parte integral de la decoración interior. Desde muebles hasta textiles, cada elemento ha sido diseñado específicamente para la villa, reforzando su carácter personalizado. Una terraza se extiende desde la sala de estar y conduce a un frondoso jardín con árboles maduros que conecta perfectamente el interior y el exterior. El ala privada de la villa alberga habitaciones, un retiro personal y una biblioteca.
El dormitorio cuenta con una estructura de cama de roble quemado diseñada a medida y mesitas de noche de bronce macizo, con ventanales que dan al jardín. La fachada está definida por la interacción de materiales. Frente a la calle, la villa presenta una superficie opaca de listones de madera carbonizados y hormigón visto, proporcionando privacidad mientras se integra sutilmente con su entorno. Frente al jardín, el diseño se abre con ventanas panorámicas y puertas correderas, creando una transición suave entre el interior y el exterior.
