Los robots de la construcción de Charlotte intentan construir el futuro en la tierra y luego

Cuando los humanos miran las estrellas y enfrentan desafíos dentro de sus hogares, la forma en que construimos debe atribuirse a una revolución. Establecer una base para la luna es crucial para avanzar en la exploración lunar y la investigación del espacio profundo, pero la arquitectura tradicional es simplemente imposible en el entorno duro del espacio. Mientras tanto, en la Tierra, estamos experimentando una crisis de vivienda, su enfoque de edificio lento, costoso y pesado para la construcción. Ingrese Charlotte, un robot arquitectónico innovador diseñado por Crest Robotics en colaboración con EarthChuilt Technology, que proporciona un nuevo enfoque para ambos.
Charlotte es el producto del pensamiento innovador que combina la robótica avanzada de Crest Robotics con los sistemas únicos de extrusión y compactación de la tecnología Earthstuilt. El resultado es un robot completamente autónomo, similar a una araña que es liviano y altamente adaptable. Charlotte ofrece una solución de construcción de emisiones de carbono asequible, rápida y baja. Ella proporciona respuestas a los desafíos de la era aeroespacial y las necesidades reales de vivienda.
Diseñador: Robótica de crucifijo y tecnología de la Tierra

La nave digital detrás de Charlotte tiene su sede en Delray Beach, Florida, lo que la convierte en más que un robot. Está equipada con un sistema de extrusión especial adjunto a su chasis. El sistema recolecta materiales fáciles de usar como arena, tierra e incluso bloques de desechos. Estos materiales se combinan con la tela y se comprimen en capas estructurales. En comparación con las estructuras estándar, los procesos eficientes, sostenibles e intensivos en carbono se utilizan para formar las paredes de los edificios.

El creador de Charlotte estableció un objetivo ambicioso: construir una casa de 200 metros cuadrados en un día utilizando el sistema de construcción sostenible de EarthBuilt. Esta rápida velocidad puede redefinir la velocidad a la que se construye una casa, especialmente en áreas con escasez de viviendas urgentes.

Pero la habilidad de Charlotte está más allá de la tierra. Su marco liviano le permite doblarse firmemente para el transporte a la luna. Una vez allí, su agilidad y diseño dinámico le permitieron operar en la superficie de la luna y construir rápidamente estructuras con materiales locales. Esto podría hacer del hábitat lunar mucho antes de lo que muchas personas piensan, lo que ayuda a apoyar a los futuros astronautas y exploradores a medida que se aventuran en el espacio.

Charlotte no solo es importante para sus habilidades técnicas. En la Tierra, ofrece una forma de ofrecer casas asequibles y sostenibles a una tasa y escala inigualables, abordando la crisis de la vivienda mientras lleva las emisiones a cero. En el espacio, ella es un paso crucial para construir la infraestructura necesaria para explorar más profundamente. Para la sociedad, Charlotte señala un futuro en el que todos puedan usar refugios y tecnología sostenibles pueden ayudarnos a lograr objetivos que alguna vez estuvieron fuera de alcance.

