Antiguo cobertizo en el patio trasero transformado en luminoso estudio de arte

oficina de arquitectura abrir una tarjeta Trabajó estrechamente con el cliente para transformar un cobertizo abandonado en el patio trasero en un estudio de pintura privado detrás de su casa en Walden, Holanda. Lo que alguna vez fue un edificio en desuso, estrecho y en malas condiciones, se ha convertido en un santuario creativo donde los propietarios pueden pintar, enseñar y encontrar inspiración.
Esta transformación comenzó con un deseo de larga data: crear un espacio personal para el arte. Los propietarios estuvieron profundamente involucrados en cada paso del camino, e incluso invitaron a su hijo menor a hacer pequeños modelos de los diseños preliminares. El proceso de colaboración se extendió a la casa, donde el cuñado del cliente elaboró un nuevo vitral, añadiendo un toque personal y artístico al proyecto.


En lugar de demoler el cobertizo original, Open Kaart optó por construir sobre sus cimientos, manteniendo intacta gran parte de la mampostería de media piedra existente. Se han conservado las paredes laterales, un silencioso recordatorio de los humildes orígenes del cobertizo. Se reemplazó el techo y se agregó un volumen de madera clara para crear altura suficiente para el espacio interno del loft.
Este enfoque reflexivo equilibra la conservación y la renovación, creando una nueva vida basada en la antigua. El resultado es una estructura a la vez sólida y alta, que conecta el pasado y el presente en el mismo espacio reducido.



Con un presupuesto limitado, el éxito del proyecto dependió del ingenio y la artesanía más que de la escala. El diseño combina inteligentemente tres paredes de mampostería originales con una nueva y cálida estructura de madera. Los tableros y listones verticales dan profundidad y ritmo al exterior, mientras que en el interior, el estudio es luminoso, funcional y acogedor, ideal para estudios de pintura y trabajos creativos.
Es importante destacar que el diseño también permite una futura expansión, asignando espacio para un posible baño. Esta es una idea pequeña pero innovadora que agrega flexibilidad sin complicar la construcción.


En el interior, los materiales y técnicas del estudio encarnan la sostenibilidad moderna. Múltiples paneles se alinean en las paredes, integrando a la perfección iluminación LED, rieles artísticos y paneles de calefacción por infrarrojos. La calefacción por suelo radiante eléctrica garantiza calor durante todo el año, mientras que el agua de la red se calienta mediante una caldera eléctrica, lo que hace que todo el estudio sea totalmente eléctrico y energéticamente eficiente. Arriba, un nuevo espacio tipo loft proporciona almacenamiento adicional e incluso un retiro tranquilo, una posición cómoda sobre el espacio de trabajo principal del pintor.


El estudio del patio trasero de Walden representa las posibilidades logradas a través de la colaboración, la artesanía y el respeto por lo existente. Con medios sobrios y gran atención al detalle, Open Kaart ha creado un espacio atemporal que se adapta perfectamente a su propósito artístico.