Se siente como vivir en una casa en el lago con enormes ventanales

Algunas casas te invitan gentilmente a entrar. Otros están tan completamente abiertos al mundo que entrar es como entrar en un tranquilo sueño. Esta cabaña junto al lago Lac Plaisant en Quebec pertenece a la segunda categoría. Diseñado por los arquitectos Marie Claude Hamelin y Loukas Yiacouvakis YH2se trata de una acogedora casa de madera que fue creada con un solo propósito: permitir que la familia conviva con la naturaleza.
El nuevo edificio está construido en el lugar de una antigua cabaña familiar, a pocos pasos del agua. Desde el revestimiento de madera hasta el altísimo tejado a dos aguas, cada elección estuvo guiada por una idea sencilla. La vida en una cabaña debe ser apacible, ordenada y siempre en diálogo con el exterior.

Los arquitectos Marie Claude Hamelin y Loukas Yiacouvakis se propusieron capturar la esencia de la vida en una cabaña. Su diseño se centra en la simplicidad, la moderación y una fuerte conexión con el paisaje circundante. La casa se asienta suavemente sobre un pequeño claro en un sitio con césped, sus cimientos están ocultos para que el edificio parezca asentarse sin esfuerzo en el terreno.
El exterior está completamente revestido de cedro blanco, dándole la apariencia de un edificio puro y tranquilo. El techo y las paredes están integrados, manteniendo una escala modesta y armonizando perfectamente con el bosque y el lago. Esta es una cabaña moldeada por la naturaleza en lugar de impuesta sobre ella.


Toda la casa está envuelta por un gran frontón, protegiendo cada espacio habitable. Le da a la cabaña una fuerte presencia sin abrumar el terreno. Dentro de la entrada, una escalera conecta los pisos con madera cálida y detalles simples de acero.
Junto a la entrada hay un pasillo que conduce directamente al corazón de la casa, guiando a los visitantes hacia la zona frente al lago.



El espacio habitable principal reúne las áreas de cocina, sala y comedor bajo un espectacular frontón. Una pared completa de vidrio mira hacia el lago, proporcionando una vista casi cinematográfica. El lado sur de la casa es completamente transparente, lo que permite la entrada de luz solar durante los meses más fríos. Los árboles maduros entre la casa y el agua suavizan el sol del verano y brindan privacidad mientras los barcos pasan.
El hastial se extiende hacia afuera para crear un pequeño porche cubierto, creando una pausa natural entre el interior y el exterior. Este es el lugar perfecto para tomar un café por la mañana o ver el cielo cambiar de color a medida que se pone el sol.


A cada lado de la casa, tres altos paneles de vidrio hacen que el límite entre el interior y el exterior casi desaparezca. Estas aberturas dejan entrar una suave luz del bosque y permiten un fácil movimiento entre la casa y el césped. El resultado es una cabina que se integra con su entorno.



La escalera de madera y acero que conduce al segundo piso muestra la misma simplicidad refinada que se encuentra en toda la casa. Desde la terraza, los visitantes pueden mirar hacia la elevada sala de estar de planta abierta y admirar el ritmo de los montantes y vigas expuestas pintadas de blanco. Estos elementos estructurales proyectan sombras suaves y dan al interior una atmósfera relajante.

El segundo piso ofrece vistas directas a la sala de estar y vistas al lago. Los frontones de doble altura elevan las vistas hacia arriba, mientras que el vidrio de altura completa trae el lago al interior de la casa. Este es un recordatorio de que cada parte de esta cabaña se forma a través de una conexión con la naturaleza.

La cabaña está diseñada para alojar a grupos grandes y tiene capacidad para 12 personas. En un dormitorio, los marcos de madera expuestos están pintados de blanco y funcionan hábilmente como estantes. Crea una solución de almacenamiento integrada que es a la vez práctica y modesta.
El otro dormitorio aprovecha al máximo su tamaño más pequeño, colocando dos camas perfectamente en el espacio. Todo ha sido dispuesto para maximizar el confort sin perder la sencillez del habitáculo.


Esta cabaña junto al lago te invita a reducir el ritmo, respirar profundamente y reconectarte con el mundo natural. Cada tabla de cedro, cada panel de vidrio y cada centímetro libre de espacio está dedicado al arte de la vida sencilla.