Los nuevos parlantes electrostáticos para automóviles crean un enorme escenario sonoro

Durante décadas, el audio del automóvil ha funcionado dentro de una restricción fundamental: los parlantes requieren conos, los conos requieren profundidad y la profundidad requiere espacio que el interior del automóvil no puede liberar. Warwick Acoustics, una empresa de alta fidelidad con sede en el Reino Unido conocida por sus auriculares que cuestan tanto como un automóvil usado, cree que ha resuelto este problema al deshacerse por completo de los altavoces cónicos. El sistema de altavoces electrostáticos para automóviles de la compañía tiene sólo 1 mm de espesor y un 90% más liviano que las unidades convencionales, pero Warwick afirma que produce un escenario sonoro que se siente diez veces más grande que la cabina real.
Diseñador: Acústica Warwick
La tecnología se basa en principios electrostáticos en lugar de la disposición tradicional de cono y bobina móvil que se utiliza en casi todos los altavoces de los automóviles en la actualidad. El diafragma ultrafino cargado eléctricamente está intercalado entre dos placas de metal perforadas que sirven como electrodos. Cuando las señales de audio pasan a través de estas placas, crean campos electrostáticos cambiantes que empujan y tiran del diafragma, creando ondas sonoras. Este enfoque elimina los imanes pesados y las bobinas móviles que hacen que los altavoces convencionales sean engorrosos y dependan de su ubicación.
Física espacial perceptiva
La expansión percibida del campo sonoro se debe a cómo los altavoces electrostáticos producen ondas sonoras planas o casi planas. Ian Hubbard, director cultural de Warwick Acoustics, dijo que estas ondas planas inicialmente sonaban planas, carentes de los agudos vertiginosos y los graves potentes de los altavoces tradicionales. Sin embargo, el oído humano interpreta esta uniformidad como distancia. «Entonces consideramos que este sonido se origina mucho más lejos, en algunos casos hasta 30 metros de nuestros oídos, lo que representa un campo mucho mayor que las dimensiones físicas del carruaje», explica Hubbard. Básicamente, el cerebro interpreta que las características acústicas se originan en una sala de conciertos y no en un espacio interior estrecho.

Este truco de percepción resuelve una limitación persistente del audio del automóvil. Las ondas sonoras se aplanan y propagan naturalmente a medida que viajan por el aire, lo que permite al oído humano percibir la direccionalidad y la distancia aparente. Dentro del automóvil, los parlantes ubicados en los paneles de las puertas y el tablero crean una experiencia auditiva comprimida porque el sonido no tiene adónde ir. El método de Warwick engaña al sistema auditivo para que perciba un espacio que no existe físicamente.

El factor de forma mínimo del altavoz ofrece opciones de ubicación que no son posibles con las unidades convencionales. Warwick recomienda puntos de montaje en los pilares A y el techo interior para colocar las fuentes de audio al nivel del oído o por encima, en lugar de debajo. Esta posición elevada mejora aún más la sensación de escuchar música en un espacio grande, ya que las salas de conciertos y salas de espectáculos suelen tener altavoces o fuentes de sonido encima del público en lugar de en el suelo.
Materiales y ventajas de fabricación.
Además de sus ventajas acústicas, los altavoces electrostáticos de Warwick no contienen elementos de tierras raras, un cambio significativo con respecto a la construcción de altavoces tradicionales que se basa en potentes imanes permanentes. La empresa fabrica los altavoces de sus automóviles íntegramente con materiales reciclados y reciclados, abordando cuestiones de sostenibilidad que influyen cada vez más en las decisiones de compra de automóviles. Si bien el impacto ambiental de los sistemas de audio para automóviles ocupa un lugar bajo en las listas de prioridades de la mayoría de los compradores, la selección de materiales elimina las vulnerabilidades de la cadena de suministro asociadas con el abastecimiento de tierras raras.

El perfil delgado y el peso liviano también significan reducciones potenciales en los requisitos de procesamiento de señales digitales. Warwick afirma que la velocidad y precisión de la respuesta electrostática de los altavoces reduce la necesidad de procesamiento electrónico de señales de audio, lo que potencialmente permite a los fabricantes de automóviles utilizar componentes DSP más pequeños y que consumen menos energía. Queda por ver si esto dará como resultado ganancias significativas en costos o eficiencia a nivel del vehículo, pero la compañía lo ve como un beneficio adicional más allá de la pura calidad de audio.

Sincronización del mercado y realidades de la producción
Warwick Acoustics ha estado trabajando en esta aplicación automotriz durante varios años y la tecnología parece estar cerca de la producción en masa. La compañía confirmó que un «fabricante de automóviles de lujo global» estrenará un sistema de altavoces electrostáticos en vehículos en algún momento de 2026, pero se negó a nombrar al fabricante. Dada la reputación existente de Warwick en audio de alta gama (los combos de auriculares y amplificadores de la compañía se venden por alrededor de 50.000 dólares), una asociación con una marca de automóviles de lujo se ajusta al posicionamiento de mercado de la compañía.
El mercado del lujo es estratégico para el despliegue inicial. Los compradores de automóviles premium esperan sistemas de sonido que justifiquen el precio de seis cifras del automóvil, y la capacidad de vender diez veces la expansión del escenario sonoro proporciona una diferenciación convincente. Que la tecnología se expanda eventualmente a los vehículos convencionales depende de los costos de fabricación y de si los beneficios de audio percibidos se pueden adaptar a diferentes preferencias auditivas y configuraciones de cabina.