Edificio Ibat/Estudio Arthur Casas

- área:
21082 metros cuadrados
Año:
2025
proveedor: +55 diseño, Prosperidad, por Kami, Élite, alimento, herencia cultural, Jorge Zarzupin, Ojo, Significado de LD, Latourgue, lámpara, lusa aluminio, lusa aluminio, Luxim, Carpintería Inova, Miqueas, tienda a juego, señorita galante, Objeto de estudio, válvula+1

Descripción de la presentación del equipo del proyecto. Diseñado por Studio Arthur Casas para la desarrolladora Cáucaso, el Edificio Ibate está ubicado en un lote de esquina en el barrio de Vila Nova Conceição de São Paulo, una zona de transición entre el eje más denso de la ciudad y un tejido urbano de silueta residencial y tranquila. Esta condición urbana fue fundamental para las decisiones de implementación y la relación del edificio con su entorno, permitiendo que el proyecto dialogara con la escala vertical de la metrópoli y el suave flujo del vecindario. Por lo tanto, este diseño Priorizar la calidad espacial y la integración con el contexto urbano, centrándose en la claridad estructural, el uso consciente de la materialidad y el valor del espacio público.

La estructura del edificio queda plenamente revelada. Las paredes exteriores están construidas con hormigón estructural y no requieren revestimiento. Tiene una apariencia veteada y una pigmentación cálida. El material establece un carácter visual sólido y continuo, sirviendo de base al paisaje vertical, que se integra orgánicamente en la arquitectura y actúa como regulador térmico y visual.

La torre se ubica en un terreno longitudinal y sus unidades se distribuyen en plantas de aproximadamente 450 metros cuadrados. En cada planta existe una unidad residencial, distribuida de forma que distingue el núcleo social, íntimo y de servicios. La circulación se realiza mediante dos núcleos de ascensores, y todas las unidades se diseñan con ventilación cruzada, amplios huecos exteriores y una cuidada orientación solar. La fachada frontal se libera completamente para crear una terraza continua con recorridos perimetrales para cada unidad, formada por jardineras alternas colocadas de forma diferente en cada planta. Esta modulación evita la duplicación entre capas, introduciendo cambios volumétricos y sombreados naturales. Barandillas metálicas de aluminio con acabado en latón y grandes marcos de cristal forman el resto de elementos de la envolvente.

En la planta baja, la transición entre lo urbano y lo arquitectónico está mediada por una gran zona de estar, sin barreras físicas, con jardines y mobiliario. En lugar de un cerramiento tradicional, el proyecto propone un “cerramiento” de vidrio que funciona como un vestíbulo abierto a la ciudad, realzando la transparencia y el carácter colectivo del espacio público. La piscina, el vestíbulo del ascensor y la escultura contemporánea de acero desgastado firmada por Túlio Pinto comparten el mismo entorno, sugiriendo una superposición funcional y simbólica entre arte, ocio y circulación.


En el interior, la continuidad material se preserva mediante el uso extensivo de hormigón, madera, vidrio y metal, así como acabados cálidos. Elementos como los paneles de madera pueden disfrazar las puertas técnicas y organizar los flujos. La selección de mobiliario incluye piezas firmadas por maestros del diseño brasileño moderno y contemporáneo como Jorge Zalszupin, Carlos Milan, Marcelo Magalhães, Guilherme Wentz, Lattoog y el propio Arthur Casas, entre los que destacan el sillón Soft (+55design) y la mesa cuadrada (Herança Cultural).

Entre las soluciones sostenibles incorporadas destacan la instalación de paneles solares para calentar piscinas, reutilización de agua e infraestructuras para la carga de vehículos eléctricos. La ventilación cruzada y la integración del paisajismo con sistemas térmicos y visuales refuerzan un enfoque destinado a mejorar la eficiencia ambiental.

En este proyecto, la atención al diseño abarca todas las escalas, con el objetivo de acercar el edificio a un elemento de permanencia e integración con la ciudad. Ibart sintetiza una estrategia de diseño en la que estructura, materiales y funcionalidad se articulan coherentemente. Su contribución al paisaje urbano radica en su combinación de racionalidad constructiva, generosidad espacial y cuidadosa interpretación del contexto, enfatizando El uso del hormigón sirve como elemento arquitectónico integral y apoya una relación simbiótica entre arquitectura y paisaje.
