Proyectos Residenciales/RW Arquitectos


Descripción de la presentación del equipo del proyecto. nació esta efímera intervención urbana El deseo de restablecer una conexión emocional y simbólica entre la ciudad y sus habitantes tomó como punto de partida el arquetipo de la casa, entendida como refugio, memoria y núcleo familiar. En un contexto donde la sociedad cubana demanda espacios públicos capaces de brindar consuelo, inspirar esperanza y promover la pausa en tiempos de crisis, el proyecto se propone como un gesto arquitectónico de encuentro, contención y pertenencia.


Esta parte está configurada como pirámide a escala de ciudad Construida a partir de módulos independientes: una pirámide de base cuadrada y sus lados formados por triángulos equiláteros. Cada unidad fue extraída manualmente utilizando técnicas tradicionales en una antigua cantera de la zona, hoy abandonada, y la extracción de bloques de piedra caliza continúa realizándose de forma espontánea y no regulada. Este movimiento rescata la memoria de la artesanía y el material, dando un nuevo significado a un recurso olvidado en el paisaje construido local.

La instalación reúne 320 bloques de piedra, cada uno de los cuales pesa aproximadamente 25 kilogramos. Estas pirámides originalmente estaban distribuidas en cuadrados Forman un mapa dinámico que invita a la participación comunitaria, rutas de apoyo, apropiaciones gratuitas y transformaciones espaciales. Su efímeraidad no radica sólo en su efímeraidad sino también en la capacidad del público para reconfigurar el orden de los módulos, generando nuevos patrones planos o incluso estructuras tridimensionales mediante superposición. Por tanto, el proyecto explora la pureza del material envejecido, revelando su resistencia, textura y memoria del tiempo.


House se considera una metáfora del amor, la unidad y la espiritualidad. Es un lugar que resume la nostalgia, el desarraigo y la necesidad de reconstrucción emocional de las familias fracturadas en la sociedad cubana. El terreno común sobre el que se proyectan recuerdos, ausencias y deseos colectivos.

La elección de la pirámide como módulo no es casualidad: su carácter universal la vincula a un patrimonio arquitectónico compartido y aún misterioso. Al igual que las pirámides de Egipto o Mesoamérica (como las de Teotihuacán, Chichén Itzá o Tikal), este proyecto recupera las dimensiones simbólicas y rituales del volumen de la pirámide, reinterpretándolo desde una escala contemporánea y social. En Casa, la pirámide se convierte en un fragmento, la unidad más pequeña capaz de construir comunidad.