Cómo se transformó una casa adosada de Brooklyn para la vida familiar moderna

En un tramo tranquilo de Sackett Street en Brooklyn, el exterior de una casa adosada familiar esconde una casa familiar cuidadosamente remodelada. Diseñador: Oficina de arquitectura de Tang Ideal para familias con niños pequeños, esta casa adosada de cuatro pisos se ha transformado cuidadosamente para apoyar la vida diaria al tiempo que introduce luz, textura y detalles inesperados en todo el interior.
Desde el momento en que entras, la entrada establece un tono tranquilo pero funcional. Un espejo redondo está fijado a la pared, flanqueado por sencillos apliques de pared que añaden una luz suave. En un lado hay ganchos para chaquetas y bolsos, mientras que un banco de madera debajo permite guardar zapatos ocultos. Es un espacio compacto pero diseñado para afrontar con soltura las idas y venidas de la vida familiar.

Una de las múltiples salas de estar de la casa se encuentra más allá de la entrada. Aquí, el marco de la chimenea sirve como algo más que un simple punto focal, con un banco incorporado para agregar asientos sin abarrotar la habitación. El diseño fomenta el uso diario, creando un espacio acogedor que se siente más relajado que formal.

La cocina continúa con la paleta sobria de la casa, con azulejos blancos que corren verticalmente a lo largo de las paredes. Los estantes flotantes de madera aportan calidez y contraste, y combinan con gabinetes blancos y mostradores de madera para crear un espacio limpio y acogedor. Estos materiales mantienen la habitación luminosa sin dejar de basarse en texturas naturales.

Mire de cerca los estantes y notará cómo los tonos de la madera suavizan el fondo nítido de los azulejos. El diseño vertical de los azulejos atrae sutilmente la atención hacia arriba, añadiendo altura y ritmo sin abrumar el espacio. Es un pequeño movimiento de diseño que eleva silenciosamente la habitación.

El comedor se encuentra junto a la cocina y su mobiliario se inclina ligeramente hacia una estética de mediados de siglo. El resultado es un espacio sencillo y moderno que resulta cálido y hogareño, perfecto para comidas familiares y entretenimiento relajante.

Uno de los elementos más singulares de la casa aparece debajo de las escaleras. Un rincón para sentarse de madera curvo está integrado directamente en el edificio, lo que le da a la casa una sensación más contemporánea. La forma personalizada transforma un área que a menudo se pasa por alto en un lugar funcional e interesante para sentarse, leer o relajarse durante el día.

Otra sala de estar en el piso de arriba cuenta con nuevas puertas francesas de acero y vidrio que se abren a un balcón estilo Julieta. Esta adición aporta más luz natural y crea una conexión más estrecha con el exterior. Las puertas reflejan una estrategia más amplia utilizada durante la renovación de reemplazar superficies cerradas con aberturas llenas de luz siempre que sea posible.

El dormitorio principal está ubicado en la parte superior de la casa, con acceso directo a la azotea y vistas de Manhattan. En el interior predominan los tonos neutros, mientras que el azul intenso añade profundidad y calma. El ambiente es intencionalmente tranquilo, lo que le permite disfrutar de un retiro tranquilo al final del día sin sentirse demasiado elegante.

En otro dormitorio, el papel pintado decorativo introduce un elemento gráfico que da una sensación más divertida que ruidosa. Aquí también vuelven a aparecer elementos de diseño azules, que crean una conexión visual con la suite principal y al mismo tiempo le dan a la habitación su propio carácter.

El baño equilibra el contraste y la moderación. Las paredes oscuras sientan las bases del espacio, contrastando con los acabados blancos, los espejos y tocadores de madera clara. Esta combinación hace que la habitación se sienta fresca y al mismo tiempo agrega suficiente dramatismo para evitar que parezca aburrida.

En una oficina en casa, los estantes de madera se envuelven cuidadosamente en las esquinas de la habitación, maximizando el espacio de almacenamiento y exhibición. Un escritorio a juego se extiende a lo largo de la pared, proporcionando suficiente espacio para que dos personas trabajen una al lado de la otra. Es un entorno práctico que refleja el enfoque general de la casa en la funcionalidad sin sacrificar el diseño.

Al rediseñar el diseño e introducir detalles arquitectónicos cuidadosamente seleccionados, Frederick Tang Architecture transformó un desarrollo estándar de casas adosadas en una casa familiar de dos niveles. Desde rincones curvos para sentarse hasta balcones Julieta y pasillos en la azotea, la renovación demuestra cómo un diseño bien pensado puede remodelar silenciosamente la vida cotidiana.