Casa P+E/¡voilá! Diario de Arquitectura |


Descripción textual proporcionada por el arquitecto. La idea de la vivienda, alejada de los edificios residenciales circundantes, surgió del paisaje rural cercano. Se inspiró en las granjas situadas en el límite entre la ciudad y el campo, donde aparecían sencillas construcciones de carácter industrial o agrícola.

La base de esta idea se resume en el concepto de «granja». Los terrenos recreativos en los vecindarios circundantes se parecen a los edificios industriales y agrícolas cercanos, pero por dentro están llenos de una vida familiar feliz.

Según normativa urbanística, el edificio se ubica en el extremo norte de la parcela, dentro de la alineación obligatoria, liberando así el jardín en la franja sur de la parcela. La vivienda prevista se plantea en planta baja y primera, además de un sótano iluminado por una franja de terraza separada del límite norte. La edificabilidad del edificio estaba limitada por los metros cúbicos, por lo que se decidió dividir el volumen para crear espacio adicional de terraza.



La posición funcional de la obra es según este eje longitudinal, orientada al sur y hacia el jardín. En el lado norte de la casa se encuentran los servicios orientados al norte, como la sala de circulación y el cuarto húmedo. Aunque es un volumen simple, se crean espacios más complejos al vaciar cada capa del volumen.

El edificio está diseñado según los estándares Passive House y es muy compacto, aislado térmicamente y hermético. El exterior y el techo están acabados en la misma chapa perfilada. En el interior se introdujeron materiales más amigables como la madera para aportar calidez a los espacios habitables.
