Descripción textual proporcionada por el arquitecto. La firma de diseño Studio Nutto renovó una casa de los años 70 en Pattaya, Tailandia, transformándola en un bar japonés escondido en el jardín trasero de un restaurante de sushi. Antes de iniciar este proyecto, los propietarios regentaban un restaurante tradicional japonés, Ronin Restaurant, que llevaba abierto siete años. Ronin es conocido por su auténtica decoración japonesa, utilizando materiales de madera tradicionales japoneses (Yakisugi). Hay una casa de 70 años detrás del restaurante con un área de jardín y un patio trasero adyacente al patio trasero del restaurante. Los propietarios imaginaron convertir la antigua casa en un espacio divertido para que los clientes continuaran con sus actividades después de la comida. Entonces compró la casa y la transformó en un «Ronin Bar». De manera única, la entrada al bar está conectada al jardín trasero del restaurante, al que solo se puede acceder a través de este sendero oculto en el jardín.
El principio rector del diseño del proyecto es «La imperfección natural es un arte». Para el exterior, los diseñadores utilizaron hormigón con un patrón de líneas verticales y piedra de granito simple. La fusión de la imperfecta fachada de hormigón y la sensación natural del granito crea un carácter único para el edificio, proporcionando una atmósfera relajante. Dado que la zona del bar está conectada con el restaurante a través del jardín trasero, este jardín se convierte en el primer espacio que los visitantes encuentran al salir del restaurante, con un interior tradicional japonés. Los diseñadores pretendieron crear un espacio con una atmósfera diferente manteniendo la estética japonesa. Se inspiraron en la arquitectura colonial japonesa, combinando características tradicionales japonesas con materiales y técnicas de construcción modernos. Los materiales utilizados en el área del patio trasero incluyen yakisugi (madera quemada japonesa), granito, hormigón, metal y vidrio corrugado.
El punto focal en el interior son las vistas al bar y al jardín. Los diseñadores utilizaron un tema negro sobre negro para resaltar la vegetación y la iluminación en el área del bar. Los materiales utilizados incluyen piedra de lava, granito gris oscuro, masilla oscura y madera maciza. Se conservaron los techos de madera maciza, manteniendo la sensación original de la casa antigua. También se han incorporado en algunas partes del interior materiales reflectantes como lámparas de cristal y espejos antiguos.
Para sorprender a quienes visitan por primera vez, el diseño evita un único espacio abierto. En cambio, presenta escenas ocultas y diferentes rincones que ofrecen una variedad de experiencias. Los visitantes pasan a través de un túnel de entrada con paneles shoji de vidrio antiguos, que conducen al área de la barra delantera, donde pueden observar a los camareros en acción desde cómodos sillones. También hay espacios privados para grupos pequeños y asientos junto a la ventana donde los visitantes pueden tomar cócteles mientras disfrutan de las tranquilas vistas del jardín japonés.
Los jardines privados están diseñados con escalones de diferentes alturas para adaptarse a diferentes usos. Los escalones inferiores se pueden utilizar como bancos y los demás escalones también se pueden utilizar como paneles para iluminación del jardín. Estos escalones crean una atmósfera íntima al elevar la altura de los árboles. El jardín privado y los espacios interiores están conectados a través de una gran ventana de hormigón, convirtiendo el jardín en una obra de arte natural. La transformación de Studio Nutto de una casa antigua en Ronin Bar muestra la fusión perfecta de elementos arquitectónicos tradicionales japoneses con un diseño moderno, brindando a los visitantes una experiencia de inmersión única.
