Lebar – casa de marco
Frame House es la casa más pequeña ubicada en Faro, Portugal, por Arquitectos de Pedro Domingos. En el paisaje pulmonar árido del Algarve, una roca de concreto (concreto) aparece como ruinas antiguas, su estado original hace eco de la dureza del entorno circundante. Sin embargo, este no es un descubrimiento arqueológico, sino una residencia contemporánea que funciona brillantemente con nuestra visión del tiempo y el lugar. Inicialmente, la casa era una serie de expresiones en blanco, una ausencia provocativa que oscurece el espacio íntimo en el interior mientras enmarcaba una visión cuidadosamente elegida del paisaje mediterráneo.
Esta interacción entre ser y no ser constituye la base conceptual de esta estructura extraordinaria. El volumen principal (un paralelo, paralelo único, paralelo) se define por una gruesa pared sureña que sirve tanto como un refugio como como un lienzo que protege el espacio interior al seleccionar y enmarcar la visión más convincente, hacia Faro, el océano y el océano. Este muro se convierte en el protagonista de la narrativa arquitectónica, no solo que contiene espacio, sino que también da forma activamente a la experiencia.
La secuencia espacial de la casa se desarrolla con la precisión de la película Este-Oeste: dormitorio, terraza de entrada, cocina, sala de estar, solarium y finalmente la piscina, una sala de agua mediada entre la forma arquitectónica y el clima. Este avance lineal evoca precedentes históricos, como el arreglo de fusión del palacio barroco, pero reinventa por completo la vida contemporánea.
En el corazón de esta secuencia se encuentra el tragaluz «diamante» que colgaba la cocina, un recorrido técnico que transforma este espacio utilitario en el centro espiritual de la casa. Aquí, la luz se convierte en materia, grabada con la misma precisión que la pared de concreto en sí. En toda la casa, otros patios y tragaluces continúan este ejercicio de grabado de iluminación, lo que permite una conversación rítmica entre la robustez y la ingravidez.
La materialidad refuerza este rigor conceptual: el concreto original domina con su ambigüedad temporal (vistas inmediatas y antiguas), mientras que los elementos de acero (ventanas, puertas, gabinetes, todos demuestran los momentos precisos de contraste técnico. El espacio del agua introduce el sonido de otro material a través de la enorme mármol blanco y su presencia fría proporciona un relevo sensorial y visual de la tose de textura del hormigón del hormigón.