Casa de Diógenes/DalArqui | Edición en español de ArchDaily

- área:
510 metros cuadrados
proveedor: Cristina Bertolucci, Macron, Delicioso, Carpintería Rosalyn

Descripción de la presentación del equipo del proyecto. El proyecto de la Casa Diógenes se desarrolló en dos fases, empezando por las zonas exteriores. El cliente planteó el reto inicial: determinar la mejor ubicación para la nueva piscina. Esta demanda dio lugar a la oportunidad de rediseñar todo el espacio exterior, creando un ambiente que valore la convivencia y el contacto con la naturaleza.

El primer paso fue trasladar la piscina a un rincón soleado del terreno, lo que convirtió el resto del espacio en un gran jardín lleno de vida. Los caminos que conectan las piscinas están diseñados con un trazado orgánico para brindar una experiencia más natural y placentera. La circulación de líquidos también fue importante ya que uno de los hijos de la pareja usa silla de ruedas.

Con esta reorganización espacial, desarrollamos una pérgola multifuncional que alberga un baño social, área gourmet, comedor y sala de estar diseñada como “cuarto de jardín”. El objetivo era crear un ambiente que dialogara con el interior de la casa, fomentando el uso diario del espacio exterior y todas sus funciones exteriores, ofreciendo un nuevo estilo de vida conectado con la naturaleza.

La transición entre exterior e interior es un punto clave del proyecto. Creamos amplias aberturas en el salón para permitir una conexión libre entre la pérgola y el espacio interior.


Fase 2: Transformación interna. Al año siguiente comenzamos a renovar el espacio interior. La intervención incluye la sala principal –un ambiente multifuncional que integra la sala/TV, el comedor y el área de piano/bar–, así como el hall de entrada, el estudio de música, el piso superior y las áreas frontal y lateral de la casa. Para unificar visualmente el espacio se creó una repisa metálica de color blanco, que recorre la pared principal y conecta con el lobby, actuando como eje integrador del proyecto.

Para hacer más acogedoras las estancias íntimas a doble altura, se diseñó un falso techo suspendido nervado de madera que reduce visualmente la altura. Este elemento orgánico remite a la pérgola exterior, reforzando la continuidad entre espacios. Otra excelente solución fue la pared curva en forma de “S”, en la que instalamos una jardinera colgante con plantas autóctonas. De ahí surgió el apodo que le pusieron los clientes: Casa Babilonia. Las hojas crecen hacia arriba y hacia abajo, formando una cortina verde en la habitación.


Retos y Soluciones. En el exterior, los principales retos fueron la cuidada instalación de la piscina prefabricada, la ejecución del pavimento orgánico con revestimiento de celosía y el desarrollo de una pérgola estructuralmente ligera y con un mínimo de columnas para mantener la permeabilidad visual.

Internamente, la complejidad del proyecto incluyó la ejecución de jardineras colgantes, la construcción de un falso techo nervado y la instalación de estanterías metálicas, que requirieron precisión para mantener su ligereza visual y funcionalidad.

Materiales y atmósfera. La materialidad del proyecto refuerza la conexión entre el interior y el exterior: baldosas cerámicas (diferentes formatos) en las zonas exteriores y vestíbulo crean continuidad; los ladrillos de demolición, presentes en la pérgola y replicados en partes de la estancia, aportan calidez al interior; madera natural, utilizada para pérgola, mobiliario y pavimento interior, garantizando la armonía entre los elementos; estantería de metal blanco, que aporta un contraste fresco y refinado a la composición; texturas ricas, como la pintura Terracor Textured y el estuco blanco, en diálogo con las superficies naturales; la iluminación de la escena, dominada por la luz indirecta, realza las texturas y crea efectos dinámicos de luces y sombras; y la presencia de plantas, ricas en vegetación tanto en el exterior como en el interior del proyecto, proporciona una sensación de frescura, movimiento y un diálogo continuo con la naturaleza. Jardineras colgantes, jardines y exuberante vegetación son parte importante del ambiente de la casa.

La Casa Diógenes es un ejemplo de cómo la arquitectura respeta el carácter original de un espacio al tiempo que redefine su propósito. La fluida conexión entre interior y exterior, el valor del verdor y el cuidado diseño en la elección de los materiales hacen que la casa sea más acogedora, habitable, integrada y esencialmente un verdadero hogar.
