Casa G&S/Barella Arquitectura

- área:
Capítulo 448 metros cuadrados
Año:
2025
proveedor: Aluminio interior , herraje, Ferro , maestro de iluminación, Nanze aire acondicionado integral

Descripción de la presentación del equipo del proyecto. El programa atiende a una familia que vive en un departamento de Buenos Aires y que decidió mudarse durante la pandemia Córdoba. El solar está ubicado en el extrarradio, en un residencial cerrado al suroeste de la ciudad, con una superficie de 1.500 metros cuadrados, ligera pendiente negativa y frente orientado al norte. La casa se plantea con una clara distribución funcional, que se refleja en la composición volumétrica. Un área de servicios, una social y otra privada, se distribuyen en forma de «U» alrededor de un patio por el que se ingresa.


El esquema nos permitió establecer relaciones adecuadas entre las funciones y orientaciones de cada espacio. El área de dormitorios mira al este con luz solar matutina, el área de servicio mira al oeste y el espacio social tiene dos fachadas. Este espacio social, sala-comedor-cocina, se relaciona con el lado norte y se conecta con la terraza de entrada a través de ventanales de doble altura, recibiendo así la mejor luz solar, mientras que el lado sur se integra completamente con la galería. Una conexión fuerte y directa con el exterior, con el verde, forma parte de nuestra cultura y por eso es siempre un requisito previo para nuestros proyectos.

Trabajamos mucho estos espacios intermedios (galerías), que son espacios de sombra, espacios frescos, donde los límites entre el interior y el exterior desaparecen, se difuminan y el interior y el exterior empiezan a fluir.



Uno de los temas que discutimos a menudo es El concepto de umbral, entendido como transición, paso de un lugar a otro. En este proyecto ampliamos el umbral de la entrada principal a la casa, creando un «paseo» que separa lo público de lo privado e invita a la reflexión y la presencia. En la búsqueda de un espacio continuo y fluido, consideramos la experiencia del viaje a casa, donde también utilizamos el agua como elemento simbólico e importante. El objetivo es que el acto de entrada represente un proceso consciente que destine un momento específico de bienvenida y despedida, considerado un acontecimiento significativo en la experiencia de vida.
