La casa de Kutná Hora es como un gato. oficina de arquitecto Ha vivido muchas vidas: primero como casa medieval, luego como edificio de finales del siglo XIX y reconstruido de nuevo en los años 70. Ahora es el hogar de una familia con tres hijos.
Esta pintoresca casa blanca con marcos de ventanas y puerta de entrada de color menta está ubicada en una calle adoquinada en Kutná Hora, República Checa. BYRÓ architekti trabajó con la familia para revivir la casa histórica quitando sus capas y tejiendo sus diversas vidas pasadas a través de aplicaciones modernas. «Cuando el cliente se puso en contacto con nosotros para un proyecto de renovación completa, la casa básicamente había perdido autenticidad y carácter, por lo que nos encargaron restaurarla», dijo la empresa en una descripción del proyecto.
La pieza central de la casa de aproximadamente 4,133 pies cuadrados (384 metros cuadrados) es una escalera de caracol que realmente conecta los edificios antiguos y nuevos. La planta baja tiene la escalera de piedra original con baches y una nueva escalera de acero va desde el piso principal hasta el ático. Los tragaluces permiten que la luz natural penetre en todas las plantas a través de la ligera escalera de metal. Además, a lo largo de la pared continuamente curvada de la escalera, hay varias bombillas de vidrio y grandes recortes de vidrio circulares internos, aprovechando las oportunidades de luz natural que fluye a través de las distintas estancias de la casa.
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